El Gobierno nacional considera un “espaldarazo” a los mercados la declaración del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, quien aseguró que el país norteamericano está dispuesto a ofrecer un crédito a la Argentina en caso de un “shock externo”. Desde la Casa Rosada afirmaron que, por el momento, no se planea utilizar ese eventual financiamiento, pero valoraron el gesto como una fuerte señal de confianza en el programa económico del presidente Javier Milei, especialmente tras el levantamiento del cepo cambiario.
La reacción oficial: prudencia institucional y euforia en redes
Mientras el entorno presidencial celebró la declaración como resultado de las negociaciones bilaterales recientes, el presidente Milei expresó su satisfacción a través de su cuenta en la red social X, adoptando un tono eufórico y desafiante hacia sus críticos. Sin hacer alusión directa a su equipo económico, el mandatario dejó entrever que la propuesta de crédito es fruto de las gestiones realizadas durante sus visitas a EE.UU.
En contraste, voceros de Balcarce 50 mostraron una postura más cauta y evitaron dar detalles sobre posibles condiciones o avances concretos, argumentando que el Gobierno estadounidense exige estricta confidencialidad. Sin embargo, dejaron claro que el acceso al crédito está sujeto simplemente a “un llamado”.
Geopolítica y relaciones comerciales en el radar
Aunque Bessent había sugerido días atrás que la Argentina debería cancelar el swap de monedas con China si logra acumular reservas, fuentes oficiales negaron que EE.UU. haya condicionado la ayuda financiera a un distanciamiento con Beijing. De hecho, no se descarta un eventual viaje de Milei a la capital china antes de fin de año, en línea con la política exterior multilateralista que busca sostener relaciones abiertas con todas las potencias.
Un apoyo alineado con el “triple ajuste”
En su última visita a Buenos Aires, Bessent elogió el “triple ajuste” aplicado por el Gobierno argentino: fiscal, monetario y cambiario. Destacó el respaldo financiero que el país ha recibido de organismos internacionales, como los USD 20.000 millones del FMI y los USD 12.000 millones del Banco Mundial, y subrayó su presencia como una muestra de apoyo concreto de la administración estadounidense.
Impacto en los mercados y la narrativa oficial
El anuncio fue interpretado como un gesto de alineamiento político y financiero que refuerza la narrativa oficial de una Argentina en recuperación, bajo un programa económico de alto impacto y reformas estructurales. Aunque el crédito aún no ha sido activado, el solo hecho de su disponibilidad funciona como una herramienta de estabilización frente a potenciales turbulencias externas.